LEPRA
LA ENFERMEDAD
DEL OLVIDO
RUTA HANSEN
LA
lepra llegó a esparcirse en varias regiones; sin embargo, no se conoce con exactitud su origen, simplemente son teorías. En este espacio del reportaje hacemos un recorrido histórico para entender cómo esta enfermedad se desarrolló en el pasado, basados en artículos periodísticos y tesis sobre la lepra.
En la investigación Historia de la lepra, ayer, hoy y mañana se menciona a Hipócrates, conocido como el padre de la medicina, en los años 430 - 360 a.C., quién definió a la lepra como una enfermedad cutánea. Los primeros médicos griegos y romanos nombraron también a la lepra como lesiones en la piel en forma de escamas, confundiéndola con otra enfermedad llamada psoriasis. Después Areteo, el sucesor de Hipócrates, cambia el nombre por elefantiasis debido al descubrimiento de tubérculos causados por la enfermedad que ocasiona deformaciones en la piel.
Para Hipócrates, la lepra llegó a la zona de Siria a través de los marinos fenicios debido a sus relaciones comerciales en varias zonas territoriales. Es por eso que se da el nombre de enfermedad fenicia. En el siglo XVIII a.C se encontraron casos de lepra en las costas de Grecia y en Persia en el siglo V a.C. Se presumen también que otro factor importante fue la dispersión de los judíos y de las armadas romanas que propagaron la enfermedad.
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Otros autores aseguran que existen registros de la lepra en la Antigua China, India y Egipto, como se menciona en el artículo La lepra en tiempos de Jesús en las tradiciones orales de Los Vedas en los años 6. 000 a.C, en la India, donde se mencionaba a la enfermedad y su atención médica; es decir, la India ya conocía de la lepra mucho antes que Grecia.
En China, en 600 a.C, en sus escritos antiguos se menciona el término Li o Lai que se refiere a lesiones en la piel aglomerando varias enfermedades, pero no específicamente a la lepra, pero existía el término Shan -Han-Lun y el Kun-Yin-Chen-Sien-Chuan que describe una enfermedad con problemas graves de deformación y mal olor.
En Egipto, en el papiro Ebers, uno de los más antiguos tratados médicos redactados en el antiguo Egipto en 1300- 1000 a.C, describe a la lepra como tumores en la piel, junto con mutilaciones. En este artículo se menciona que varios investigadores afirman que Egipto es el lugar donde se desarrolló esta infección.
LA BIBLIA
En La Biblia, la lepra representaba un castigo divino para aquellos que realizaban malas acciones o también como un milagro ante las acciones de Jesús de curar a los leprosos y purificar el alma, quitándoles las manchas de su piel y sus deformidades.
Estos relatos se encuentran en el Antiguo Testamento, mismos que fueron compartidos no solo en el pueblo hebreo, sino también en otras religiones similares como el cristianismo e islamismo. En el Nuevo Testamento, el relato de la lepra es tratado como un elemento que permite a Dios realizar el milagro de curación; contrario a lo que pasaba en el Antiguo testamento, donde la lepra era relatada como consecuencia de los pecados.
La falta de higiene que vivieron los hebreos fue el causante de muchas enfermedades de piel y la razón de que Moisés dedicara un capítulo extenso a las infecciones cutáneas donde menciona a la lepra como la enfermedad de castigo.
Sin embargo, el libro religioso sostiene que la lepra es una enfermedad que ocasiona la caída de la piel en pedazos, deformando cada zona del cuerpo o también es una enfermedad que cubre tu cuerpo de escamas y hace que el enfermo tenga una apariencia pálida, interpretándolo como un ser impuro.
TRATAMIENTOS ANTIGUOS
A falta de medicamentos, las autoridades estaban encargadas de la separación de los enfermos con los habitantes sanos, también las personas sospechosas de tener lepra eran denunciadas y debían someterse a revisiones por los sacerdotes que diagnosticaban la condición del enfermo.
Por otro lado, los tratamientos que antes se utilizaba parar curar la lepra en la antigua China era la acupuntura, así como aceites y sustancias minerales como el arsénico. Otra opción natural era la preparación de sopas con animales como serpientes o tortugas.
En la India se usó el aceite de chaulmoogra que proviene de la semilla del árbol del mismo nombre y se usó por mucho tiempo para curar a los enfermos de lepra. Actualmente este aceite se lo sigue usando para tratamiento en la piel.
Imangen del medio Aleteia del reportaje: ¿Leprosos? ¡No! Se les llame por su dignidad enfermos de morbo de Hansen.
EDAD MEDIA
La lepra tuvo consecuencias terribles en los enfermos. Según el artículo La lepra en la Europa Medieval. Se generó un temor extremo al contagio de esta infección, que en ese tiempo era incurable. El cuerpo de una persona con lepra era mutilado y gangrenado lo que ocasionaba un terrible olor y su aspecto provocaba miedo.
Los leprosos vivían en extrema pobreza debido a que sus bienes eran embargados por la iglesia y se les imponían prohibiciones civiles como eclesiásticas. No podían, por ejemplo, ingresar a la iglesia, mercados y plazas, incluso ser enterrados en cementerios públicos.
Para poder identificar a un leproso, ellos debían vestir con una capa gris con unas telas grandes que tenían bordado una cruz amarilla. Esto junto con un sombrero, guantes y una campanilla para avisar de su presencia. Si en un caso querían pedir limosna o comprar algo, debían tener un largo bastón que facilite recoger lo que necesitaban.
En el año 583, la Asamblea de Obispos reunidos en el Concilio de Lyon decidió crear las leproserías, un lugar donde los enfermos vivían recluidos de su familia o pareja y sin ningún contacto con la comunidad. La medicina de la Edad Media creía que la causa del mal era la comida o el aire dañados.
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En el siglo XI al XIII, la lepra se extendió por gran parte de Europa debido a las Cruzadas. El resultado de este incremento hizo que se creen 2000 casas para los infectados de lepra; sin embargo, esta infección se confundía mucho con otros males como las sífilis y psoriasis. En el siglo XVI las cifras se redujeron moderadamente, pero los casos continuaban en las costas del Mediterráneo.
La lepra tenía dos variables: la lepra negra que consistía en infecciones severas con manchas y deformaciones, y la lepra blanca que se caracterizaba por falta de sensibilidad.
Durante la Edad Media se desarrollaron varios hospitales especializados con la lepra, pero su finalidad era la exclusión del enfermo. La lepra también se lo conocía como el Mal de San Lázaro, es por eso que muchos de los hospitales tenían el nombre de Lazaretos o leproserías. Esto se menciona en el artículo Mal de Lázaro. En uno de los relatos religiosos de la Biblia, Lázaro de Betania padeció de lepra y fue resucitado por Jesús.
RUTA
AMÉRICA
CONQUISTA ESPAÑOLA
Según la tesis La epidemiología de la lepra en el Perú, el autor afirma que la lepra llegó al continente debido al descubrimiento de América 1492 con los conquistadores europeos. Los españoles trajeron esta enfermedad debido al tráfico de esclavos que traían desde África. El primer centro de leprosos, o lazareto se fundó en 1520, posteriormente se construyeron más reclusorios.
1901 a 1905 se registraron casos de lepra en la Amazonia de Perú, es por eso que se construyó en 1907 un Asilo de Emergencias para los leprosos frente a la ciudad de Iquitos. En 1925 se creó otro centro para leprosos en San Pablo, en el río Amazonas, junto a la frontera con Brasil.
El autor sintetiza que la lepra infantil en Loreto era uno de los puntos más severos del mundo por la ausencia de buenas defensas en el cuerpo por parte de la población.
Loreto es uno de los 24 departamentos que forman parte de la República de Perú. Su capital es Iquitos y fue fundado el 7 de febrero de 1866.
Por otro lado, en la publicación de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Cuenca, en el Ecuador existe una pequeña epidemia de esta bacteria y está presente en todas las provincias; sin embargo, los sectores rurales son los más afectados por sus condiciones higiénicas y su situación socioeconómica.
Esta investigación resalta que la lepra llegó al país con la conquista española y se pronuncia más en la provincia de El Oro cuando los españoles deciden establecerse en varios sectores para la explotación de los minerales.
Poco a poco la enfermedad se expandió en la provincia de Loja, Azuay, Guayas, Los Ríos, Bolívar e Imbabura. La provincia de El Oro ha sido conocida como el área de la lepra, a pesar que Ecuador es registrado como un país libre de esta infección.
SITUACIÓN DE LA LEPRA EN 12 PAÍSES DE AMÉRICA EN 1980
En 1956 se pueden encontrar datos concretos sobre esta enfermedad en un estudio de la Organización Panamericana de la Salud a 12 países de América Latina y el Caribe.
Para el año 1980 a 1983 la Organización Panamericana de Salud realizó otra revisión de la enfermedad junto con la cantidad de habitantes, donde Brasil, Colombia y República Dominicana presentaban los más altos resultados de lepra.
El criterio para la selección de los 12 países se basó en las diferentes regiones geográficas, la población total y el conjunto de enfermos con lepra registrado en el año 1980. Los 12 países seleccionados fueron: Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Guyana, México, Paraguay, República Dominicana, Trinidad y Tobago y Venezuela.
Argentina presentó tasas de prevalencia inferiores a 50 por 100. 000. Cuba presentó una cantidad estable igual que en el caso de Argentina. Los dos países se encuentran en situación regresiva, es decir, los casos son cada vez menores.
Venezuela mostró cifras menores notables a diferencia del año 1977. Su tasa de prevalencia fue de 91,9 por 100. 000 habitantes. Se encontró en un límite de medio y alto.
Costa Rica presentó una tasa de prevalencia estable con valores considerados como categoría media. Trinidad y Tobago tuvo una tasa de prevalencia elevada, pero ha disminuido desde 1977. Cuba por otro lado, no presenta cifras de discapacidad.
Paraguay presentó una tasa alta de prevalencia correspondiente a los últimos 30 años. En Ecuador se observó una tasa muy baja, pero el número de casos colocó al país en una categoría media. Por otro lado, México tuvo una tasa descendente en los últimos 30 años.
Guyana presentó una gran disminución de casos de lepra y pasó de alta a media categoría. Al contrario de Paraguay que tuvo cifras no favorables en casos de menores con lepra.
Brasil presentó valores altos desde los años 50. Las últimas cifras no fueron favorables en todos los indicadores específicos. El 70% de los casos registrados y el 80% de casos detectados.
Colombia tuvo valores intermedios dentro de los últimos 30 años, lo que equivale a una endemicidad media. Se observaron resultados no favorables en todos los indicadores.
República Dominicana presentó cifras ascendentes en los casos de lepra y los resultados no fueron positivos de acuerdo a los indicadores generales. La situación progresiva de la lepra en este grupo de países: Colombia, Brasil y República Dominicana era preocupante, especialmente en Brasil por su elevado número de casos.